Danielle O’Toole se convierte en la segunda jugadora que renuncia al representativo de softbol de México, después de reconocer que fue una de las participantes que dejó sus uniformes de entrenamiento en la Villa Olímpica de Tokio 2020. Explica los hechos y señala que no lo hizo con la intención de faltar al respeto a la nación que defendió y “por la que trabajamos tan duro”.
“Asumo la responsabilidad de dejar algunas prendas de Lining en Tokio. Le pregunté al servicio postal del pueblo Olímpico si enviaban cajas de nivel Internacional y dijeron que solo cartas. Debimos haber hecho más preguntas, considerar la posibilidad de donar, cualquier cosa, excepto dejarlos como lo hicimos y por eso lo siento mucho. Desde el fondo de mi corazón”, informó la atleta en sus redes sociales.
O’Toole fue una de las atletas más destacadas en el equipo de softbol de México, que quedó en el cuarto lugar Olímpico. La deportista aceptó que el partido que perdieron contra Canadá y significó quedar fuera del medallero, fue el último que disputó con el representativo nacional.
“Jugué mi último partido para México, mi camiseta blanca tiene tierra y lágrimas de nuestro último partido y seguirá así para siempre. Estaré colgando mis camisetas en mi casa, porque logramos algo histórico. Porque estoy orgullosa de ser mexicana. Orgullosa de mi herencia. Orgullosa de haber tenido el honor de representar a México”, se lee en su publicación.
La polémica en torno a las jugadoras de softbol inició a partir de que dos atletas olímpicas encontraron algunos uniformes de entrenamiento tirados en la basura. Esa acción, de inmediato causó indignación en redes sociales.
“Llevar a México cruzado en mi pecho ha sido un honor y un orgullo. Nunca arrojaría nada con intenciones maliciosas o para faltarle el respeto al país por el que trabajamos mucho. Elegí representar a México. Estoy agradecida con mi familia que vino a Estados Unidos y trabajaron duro para que yo pudiera tener esta vida”.