La comunidad de Tequila, en el estado de Jalisco, quedó conmocionada luego de que se diera a conocer la noticia de que dos hermanas habían fallecido electrocutadas al intentar salvar a un niño que cayó a una alberca.

Las mujeres de 29 y 31 años de edad decidieron ingresar para ayudar a un pequeño de 9 años de edad quien pedía ayuda alegando que sentía “toques” mientras estaba sumergido en el agua.

Ante ello, ellas no dudaron en actuar para evitar una tragedia. Primero ingresó una para auxiliar al menor, no obstante, la descarga eléctrica fue tan grande que ella ya no logró salir pese a rescatar al niño. Al percatarse de que no respondía, su hermana se aventó a la alberca, pero al estar electrificada obtuvo el mismo destino y ambas fallecieron en el lugar.

Reportes extraoficiales indicaron que una de ellas era residente del municipio de Tequila, mientras que la otra había ido de visita desde Guadalajara.

A pesar de que los familiares de estas dos hermanas se encuentran de luto, el menor del 9 años fue puesto a salvo y rápidamente lo trasladaron a la clínica del IMSS más cercana donde se dijo que está estable, pero su diagnóstico es reservado.

Autoridades municipales indican que la posible causa de la electrificación de la alberca se debió a un problema dentro de la iluminación del lugar, aunque todavía deberán trabajar en conjunto con los forenses para determinar qué sucedió en realidad.

Ante lo sucedido, Protección Civil de la entidad indicó que es muy peligroso ingresar a una alberca que se encuentra electrificada, pues puede probar descargas que provocan graves quemaduras o incluso la muerte como ocurrió en esta ocasión.

El sistema nervioso central se ve muy afectado y puede causar paros cardiorrespiratorios derivados en un fallecimiento. También, es importante destacar que este tipo de contactos con la electricidad provoca problemas respiratorio que imposibilitan la capacidad de nadar o mantenerse en la superficie, por lo que es necesario revisar el cableado cerca para evitar tragedias.