Vecinos de la colonia El Pueblo de Monclova se queja por corte de luz

El equipo eléctrico, propiedad de Comisión Federal de Electricidad (CFE) tuvo problemas y desde temprana hora del sábado hasta el lunes dejó de funcionar

Luego de que el transformador de la calle Manuel Acuña, esquina con Ejército Mexicano, se averiara desde la tarde del sábado, vecinos de la colonia El Pueblo de Monclova llevaban este lunes dos días sin electricidad.

Los equipos eléctricos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) tuvieron problemas y dejaron de funcionar en las primeras horas del sábado y en la tarde.

Un equipo de empleados del muro estatal se presentó ese día hasta las 11 pm, y luego de realizar algunos ajustes, encendieron el dispositivo. Sin embargo, sólo unos 10 minutos después, comenzó a calentarse nuevamente, cortando la electricidad a toda la cuadra, según los vecinos.

Según María López, vecina de la zona, cuadrillas de la CFE llegaron en tres ocasiones distintas, pero el transformador, que explotó durante la inspección más reciente cuando realizaban pruebas de vacío, no funcionó en ninguna de esas ocasiones.

Dijo que el trabajador de la paraestatal le había informado que las fallas se debían a un transformador sobrecalentado por «La Coqueta», un antro que estaba al lado del transformador y donde se almacenaba el exceso de energía.

Dijo que instalaría un nuevo transformador el domingo por la tarde, pero al no hacerlo, la vecina de la calle Manuel Acuña llamó a la trabajadora, quien le informó que no había nada en el almacén para reemplazarlo.

El jefe de cuadrilla le informó que sus superiores se ocuparían de la compra de un transformador a la misma paraestatal, pero de la ciudad de Monterrey.

38 familias que habitan en la calle Manuel Acuña se ven perjudicadas por el suministro de energía eléctrica, según un vecino que lo calificó de injusto.

Agregó que la mayoría de estos hogares albergan a personas de la tercera edad que necesitan electricidad para conservar sus alimentos especiales debido a su dieta, energía para aparatos de aire y electricidad para mantener refrigerados sus medicamentos.

Debido a que los portones eléctricos son demasiado pesados ​​para que los adultos mayores los abran, el denunciante afirmó que ni siquiera podían salir de la casa.

Luego de dos días sin electricidad, dos comerciantes del sector denunciaron pérdidas por alimentos y productos que se estropearon dentro de los refrigeradores.

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