Un juzgado de Barcelona ha acusado al exfutbolista de los Pumas Dani Alves de agresión sexual tras presuntamente violar a una joven en el reservado de una discoteca de Barcelona el pasado mes de diciembre.

En su fallo, la Sección 21 del tribunal confirmó la acusación del brasileño, concluyendo que las declaraciones de la víctima y de los testigos y las pruebas periciales sustentan pruebas suficientes para imputarle el delito de agresión sexual.

Este decreto establece un plazo de cinco días para que el Ministerio Público y los acusadores particulares interpuestos por la víctima puedan presentar los documentos de calificación, y se establecen los trámites finales antes del inicio del juicio.

En julio, el presidente del Juzgado de Instrucción número 15 de Barcelona imputó a Alves y en una resolución confirmó su prisión preventiva en los Mossos d’Esquadra por la acusación de violar a una joven de 23 años en una habitación reservada en una discoteca de Sutton y se le concedió una fianza de 150.000 euros para cubrir posibles indemnizaciones para sus víctimas.

Alves es defendido desde octubre por Inés Guardiola, quien ha pedido que se desestime el caso porque las filtraciones sobre la investigación violaron la presunción de su inocencia y plantearon dudas sobre «partes interesadas» y fueron ignoradas en la investigación de intereses y consideró que el juez había perdido su «neutralidad» debido al «juicio paralelo» contra el exfutbolista en los medios.

“Cuando la difusión mediática lo es a gran escala, la contaminación de la investigación judicial se vuelve irremediable e irreversible, siendo la vulneración de los derechos fundamentales que asisten al investigado insubsanable”, dijo la defensa de Alves.

El juzgado de Barcelona reconoció que los casos que involucran a «personajes públicos» tienen «indudable influencia mediática» y que los medios pueden expresar opiniones que vulneran la presunción de inocencia en «aspectos extraprocesales», aunque concluyó que esto no afecta al sistema judicial. . el proceso y la búsqueda de una solución están bajo la protección del derecho al honor.

Dani Alves dio cuatro versiones diferentes

Durante la investigación, Alves dio cuatro versiones diferentes ante el tribunal: primero afirmó que no conocía a la víctima, pero luego admitió que conoció a la joven en el baño de una discoteca y que no había nada entre ellos. Sucedió cuando el juez cuestionó su explicación con pruebas biológicas, insistió en que el sexo oral de la chica fue consensual con él.

Posteriormente, en abril del año pasado, cuando se conoció que las pruebas biológicas revelaron rastros de esperma de Alves en las partes íntimas de la víctima, el futbolista volvió a declarar voluntariamente ante la instructora, admitiendo que había tenido relaciones sexuales consentidas. Inicialmente, mintió para ocultar su infidelidad a su esposa.