En Saltillo, Coahuila, el pequeño Isaac, de cinco años, falleció en el Hospital Materno Infantil tras cuatro días de sufrimiento debido a la rickettsia. El miércoles anterior, Isaac comenzó a presentar fiebre, dolor abdominal, mareos y debilidad, lo que alarmó a su padre, Daniel Reina Salazar.
Preocupado, Daniel llevó a su hijo a una clínica cercana en la colonia Nueva Tlaxcala. Allí, compartió con la doctora su sospecha de que Isaac había sido mordido por una garrapata, señalando una picadura en su pie. Sin embargo, la doctora descartó esa posibilidad, diagnosticando a Isaac con una ampolla y una infección estomacal, y le recetó Paracetamol y Trimetoprima.
A pesar de las dudas, Daniel confió en el diagnóstico y no buscó una segunda opinión. En los días siguientes, la salud de Isaac se deterioró rápidamente. El viernes, lo llevaron al Hospital Ixtlero, donde les sugirieron trasladarlo al Hospital Materno Infantil. Lamentablemente, durante la madrugada del domingo, Isaac sufrió un paro respiratorio y murió.
Daniel expresó su arrepentimiento por no haber buscado atención médica especializada antes. Los médicos le explicaron que los primeros tres días tras la mordedura de una garrapata son cruciales para combatir la bacteria que causa la rickettsia. Al seguir el diagnóstico inicial de una infección estomacal, el tratamiento adecuado no se administró a tiempo.
Isaac, quien había perdido a su madre en enero, fue velado en su hogar, ubicado frente a la Escuela Primaria Xicoténcatl.