El apagón analógico en Bolivia, originalmente previsto para comenzar en noviembre de este año y concluir en 2025, fue aplazado hasta mayo de 2030, informó el ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño.
La decisión, formalizada mediante decreto supremo, establece un nuevo cronograma dividido en tres fases para completar la transición a la televisión digital en todo el país sudamericano.
En la primera fase, los departamentos del eje central -La Paz (oeste), Cochabamba (centro) y Santa Cruz (este)-, junto a algunas ciudades intermedias, serán los primeros en migrar a la señal digital en mayo de 2026. En la segunda fase, la transición abarcará regiones con poblaciones mayores a 40.000 habitantes, programada para mayo de 2028 y, finalmente, en la tercera fase, el apagón analógico llegará a las áreas rurales y remotas en mayo de 2030.
El ministro explicó que la decisión de extender el plazo se basa en un estudio realizado en las principales ciudades del país, que reveló que muchas viviendas aún dependen de televisores analógicos.
Montaño expresó que el cambio en el calendario fue consensuado con los principales canales de televisión de Bolivia, cuyos representantes manifestaron su preocupación sobre el impacto de una transición acelerada, especialmente en zonas rurales y de menor desarrollo económico.
La transición a la televisión digital es crucial para mejorar la calidad de la imagen y el sonido, ofrecer más opciones de canales y servicios interactivos, pero aún enfrenta el reto de la baja penetración de televisores digitales en los hogares más humildes.
Según la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT), hasta 2021, alrededor del 40 por ciento de los hogares bolivianos todavía no contaba con televisores digitales, lo que subraya la necesidad de un periodo de transición más extenso.