Bolivia se prepara para enfrentar una intensa ola de calor que afectará a seis de los nueve departamentos del país, según una alerta emitida por el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi).

El pronosticador del Senamhi, Kenny Quisbert, dijo que las temperaturas oscilarán entre los 36 y los 41 grados Celsius, ante lo cual las autoridades emitieron la alerta naranja que entraran vigor a partir de mañana sábado y hasta el próximo martes, lo cual implica la adopción de medidas preventivas para mitigar los riesgos asociados a este fenómeno.

Los departamentos bolivianos afectados serán Tarija (sur), Santa Cruz (este), Chuquisaca (sur), Beni (noreste), Pando (norte) y el norte de La Paz (oeste) serán los más afectados por este fenómeno, mientras que en Potosí se activará una alerta hidrológica ante un posible desborde de ríos.

«El pronóstico indica un ascenso de las temperaturas máximas, que superarán los promedios históricos en varias regiones del país. Esto representa un riesgo para la salud, por lo que instamos a seguir las recomendaciones de las autoridades y evitar la exposición prolongada al calor», explicó Quisbert.

El especialista alertó que este tipo de fenómenos, que incluyen masas de aire seco y cálido, son cada vez más frecuentes y prolongados, lo que agrava las condiciones ambientales y eleva los riesgos para la salud pública.

Precisó que las alertas meteorológicas están reservadas para fenómenos de alta intensidad, como el que ahora amenaza con romper récords de temperatura en Bolivia.

En 2023, el país experimentó un noviembre atípico con olas de calor sin precedentes que llevaron los termómetros a marcar 45 grados Celsius en el Chaco boliviano, registros que superaron 15 marcas históricas, según el Senamhi.