Un severo temporal de viento y lluvia afectó el Área Metropolitana de Buenos Aires con destrozos materiales, caída de cientos de árboles y suspensión del suministro eléctrico en distintos barrios de la capital de Argentina, confirmaron las autoridades capitalinas.
El Gobierno de Buenos Aires difundió en redes sociales que de acuerdo con los equipos de emergencias, así como del Centro Único de Coordinación y Control de Emergencias, la mañana del martes se registraron decenas de sucesos relacionados «a la acción del viento».
El fenómeno meteorológico tuvo ráfagas de viento entre los 80 y los 100 kilómetros por hora, situación que a su vez generó cancelaciones en los servicios ferroviarios y aéreos.
En la ciudad capital, el temporal causó la caída de árboles que dañaron viviendas y vehículos estacionados en la calle, además de encharcamientos, voladura de techos y falta de suministro eléctrico con más de 330.000 usuarios afectados en el Área Metropolitana de Buenos Aires.
Personal de Bomberos y de la Defensa Civil llevó a cabo distintas tareas para asegurar zonas con antenas caídas, liberación de calzadas por árboles sobre tendidos eléctricos, carteles caídos y trabajos por techos dañados.
A raíz de la tormenta, la temperatura descendió de manera abrupta en pocas horas en la ciudad de Buenos Aires.
Los registros del Servicio Meteorológico Nacional reportaron el lunes una temperatura máxima de 38,5 grados Celsius a las 16:00 hora local (19:GMT), pero para las 06:00 hora local (09:00 GMT) de este martes había bajado a 16,7 grados Celsius producto del frente frío que desencadenó el temporal.
Los sitios anegados y la caída de árboles sobre el tendido eléctrico dejaron sin energía a más de 330.000 usuarios, numeró que luego decreció a unos 57.000 al mediodía de este martes, según datos del Ente Nacional Regulador de la Electricidad.
Vuelos que debían partir o aterrizar en el Aeroparque Metropolitano o en la terminal internacional de Ezeiza también fueron cancelados o demorados.
Resultó afectado además el servicio de trenes de cercanías que determinó la interrupción de distintos ramales, en algunos casos por falta de suministro eléctrico y en otros por la caída de árboles sobre las vías.
