Tres niños de 10, 8 y 6 años perdieron la vida en la comunidad de San Cayetano, en el municipio de El Bosque, Chiapas, presuntamente tras consumir accidentalmente un alimento envenenado.

De acuerdo con testimonios de pobladores, se había colocado una sustancia tóxica en ciertos alimentos con el objetivo de reducir la población de perros callejeros. Durante la madrugada del jueves, policías comunitarios retiraron los restos y los depositaron en un basurero local.

Horas después, los menores acudieron al sitio tras comprar bombones y, sin saberlo, habrían ingerido pan contaminado. Al poco tiempo comenzaron a sentirse mal y regresaron a casa, donde sus familiares intentaron auxiliarlos, pero no lograron estabilizarlos.

El gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, informó que la Fiscalía General del Estado ya inició una investigación para esclarecer lo ocurrido. Los cuerpos de los niños, originarios de Chenalhó, fueron trasladados a su comunidad en una ambulancia de la Secretaría de Protección Civil.

Autoridades locales recordaron que hace cinco meses se aplicó un método similar en la comunidad para controlar la población de animales, lo que ha generado preocupación entre los habitantes.