El expresidente Donald Trump aseguró que Elon Musk “ha perdido la cabeza” y que no tiene interés en hablar con él por ahora, en una entrevista telefónica con ABC News realizada este viernes. Sus declaraciones surgen luego de que se rumorara sobre un posible acercamiento entre ambos, tras una publicación del sitio Político.
Trump afirmó que fue Musk quien intentó contactarlo, pero que él no está dispuesto a entablar diálogo “por el momento”. Incluso sugirió que podría cancelar contratos y subsidios gubernamentales que benefician a las empresas del magnate, minimizando la disputa y enfocándose en temas como la inflación, la inversión extranjera y una posible visita a China.
“¿Te refieres al hombre que ha perdido la cabeza?”, respondió Trump cuando fue consultado sobre el empresario. Añadió que no le interesaba especialmente hablar con el dueño de Tesla en este momento.
En declaraciones posteriores a CNN, Trump fue aún más tajante: “Ni siquiera pienso en Musk y no hablaré con él durante un tiempo”. Los comentarios se dieron en una llamada breve, según describieron los medios.
Fuentes cercanas al expresidente indicaron que Trump se mostró más decaído que molesto por el distanciamiento con Musk. Un asesor presente la noche anterior relató que el exmandatario parecía afectado, algo que se reflejó en su tono de voz durante la entrevista con ABC.
La tensión también se trasladó al entorno político. El vicepresidente JD Vance expresó su respaldo a Trump en X (antes Twitter), sin referirse directamente a Musk: “El presidente Trump ha hecho más que nadie en mi vida para ganarse la confianza del movimiento que lidera. Me enorgullece estar a su lado”.
Desde la Casa Blanca, la secretaria de prensa Karoline Leavitt calificó el conflicto como “otro episodio desafortunado de Elon”, aludiendo al rechazo del empresario a una legislación clave del gobierno, que —según la vocera— “no incluye sus políticas”.
Aunque inicialmente Musk lanzó duras críticas y amenazas, posteriormente mostró señales de moderación. Según ABC News, el empresario se retractó de su advertencia de retirar del servicio la nave Dragon, utilizada para llevar astronautas y suministros a la Estación Espacial Internacional. El cambio de postura ocurrió tras un consejo en X de un usuario con apenas 141 seguidores, al que Musk respondió: “Buen consejo. Ok, no retiraremos Dragon”.
El conflicto entre Trump y Musk, que alguna vez compartieron muestras públicas de simpatía, ahora ha escalado hasta convertirse en una de las tensiones más marcadas entre política y tecnología. Según fuentes citadas por ABC News, esta ruptura podría impactar en sectores estratégicos como la industria automotriz y aeroespacial.
Incluso se reportó que Trump podría deshacerse del Tesla rojo que había adquirido como muestra de apoyo a Musk. Un alto funcionario comentó que el expresidente evalúa regalarlo o venderlo. El automóvil fue visto estacionado el jueves en West Executive Avenue, un día después de que Trump inspeccionara otros modelos de Tesla en la Casa Blanca.
