Cerca de 50 mil personas vestidas de blanco participaron este domingo en una marcha por la paz en Culiacán, Sinaloa, para exigir el fin de la violencia y la restitución de la tranquilidad en el estado. La movilización fue convocada por 40 organizaciones civiles y respaldada por el obispo de la Diócesis de Culiacán, Jesús Herrera Quiñónez, quien envió un mensaje contundente: “No están solos, Dios los acompaña”.
Desde las escalinatas del templo católico de La Lomita, punto icónico de la capital sinaloense, partió la multitudinaria marcha rumbo a la catedral de Culiacán, sobre la avenida Álvaro Obregón. Globos blancos, pancartas con mensajes de paz y el grito unísono de “Fuera Rocha, fuera Rocha”, marcaron el tono de la manifestación.
En su intervención, el obispo hizo un llamado a las autoridades para que brinden justicia y seguridad, y exhortó a no caer en la corrupción. A la ciudadanía pidió alzar la voz con valentía y no ceder ante la violencia que ha envuelto al estado durante casi un año.
Uno de los organizadores del movimiento, el empresario gastronómico Miguel Taniyama Ceballos, explicó que la convocatoria surge del cansancio y desesperación de la sociedad ante una ola de violencia sostenida que afecta todos los ámbitos: económico, social y educativo.
Según datos del más reciente informe del Consejo Estatal de Seguridad Pública, en el último año se han registrado mil 189 denuncias por desaparición de personas y mil 782 homicidios. Entre las víctimas se cuentan mujeres, menores de edad y 48 policías.