El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó que ordenó el envío de uno o dos submarinos nucleares a la costa de Rusia como medida preventiva, luego de sentirse “un poco amenazado” por Moscú. La declaración fue hecha durante una reunión sin precedentes con cientos de generales y altos mandos militares en Quantico, Virginia.

“Recientemente nos sentimos un poco amenazados por Rusia, así que envié un submarino nuclear, el arma más letal jamás creada”, dijo Trump. Añadió que la embarcación se encuentra “al acecho” y destacó su capacidad de ser completamente indetectable. “Estoy seguro de que habrá necesidad de usarlo. Es increíble: nadie puede detectarlo, ni desde el aire ni bajo el agua”, afirmó.

El mandatario subrayó que Estados Unidos mantiene una ventaja tecnológica de al menos 25 años sobre Rusia y China en materia de armamento nuclear y proyección de fuerza. Sin embargo, advirtió que estos países podrían alcanzar a Washington en unos cinco años si mantienen su ritmo de desarrollo.

Trump mencionó que el despliegue de los submarinos fue solo “por precaución”, reiterando que la flota estadounidense cuenta con capacidades avanzadas y sigilosas que garantizan su dominio militar. También atribuyó ese liderazgo a lo que describió como una “emocionante renovación del espíritu” de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos.

La declaración tuvo lugar durante una inusual cumbre militar encabezada por el secretario de Guerra, Pete Hegseth, quien organizó la reunión en una base del Cuerpo de Infantería de Marina en Quantico, a unos 60 kilómetros de Washington D.C. La junta se da en un contexto de creciente tensión interna en el Pentágono y especulaciones sobre posibles purgas.

En su intervención, Hegseth anunció nuevas directivas orientadas a restaurar lo que calificó como “el más alto estándar masculino” dentro de las fuerzas armadas. Entre los cambios, propuso requisitos físicos más estrictos para evitar la presencia de “soldados gordos y barbudos”.

El funcionario también insinuó modificaciones en el liderazgo militar, criticando ascensos pasados que, según dijo, se dieron “por razones equivocadas: raza, cuotas de género y supuestos logros históricos”.