A base de corrupción, influyentísmo y sobornos, se ha despojado de su patrimonio al Ingeniero Eduardo Solís Arreola por parte de la familia dueña de la famosa taquería «Tacos Checo», quien le rentaba su terreno desde 1989, ubicado sobre la calle Abasolo a la altura de la colonia Guanajuato.
Sería a partir del incendio de la taquería, en 2017, que a través de movimientos fraudulentos, la taquería logró apoderarse del terreno del ingeniero Solís Arreola.
Los familiares del afectado manifestaron que el acto de injusticia es producto de la testificación y fabricación de hechos que llevaron a un juicio falso por parte de la familia de Fernando Cárdenas Dávila.
El acaparamiento del terreno que causó la protesta tuvo lugar después del incendio del 16 de febrero del 2017, cuando las llamas consumieron en su totalidad el local ubicado en la calle de Abasolo, donde posteriormente se comenzarían a levantar las estructuras que ocupan ahora el terreno en disputa.
Al día de hoy, la taquería ya construyó un muro y cercó con una malla el predio, mismo que usa como estacionamiento para su negocio.
Desde hace meses, el Ingeniero Solís Arreola ha pedido en reiteradas ocasiones la ayuda de las autoridades para revertir este atropello, mismo que ha denunciado en múltiples medios de comunicación locales.