El intento del golpe de Estado en Bolivia fracasó principalmente por la respuesta inmediata y espontánea del pueblo y de las organizaciones sociales, quienes junto a líderes políticos condenaron unánimemente la «aventura golpista», afirmó el jueves el embajador boliviano ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Héctor Arce, durante la 54 Asamblea General del organismo efectuada en Asunción, Paraguay.
En declaraciones difundidas por la prensa local, el diplomático señaló que otra de las razones que explican el fracaso de la intentona golpista perpetrada el miércoles en La Paz fue la «valiente y decidida» postura del presidente boliviano, Luis Arce, quien enfrentó personalmente al general insurrecto y ex comandante del Ejército, Juan José Zúñiga.
De igual forma mencionó la falta de apoyo militar hacia Zúñiga, la fuerte condena internacional y el respaldo inmediato de presidentes y gobiernos de diversos países, así como de organismos internacionales.
Héctor Arce expresó su profundo agradecimiento a la comunidad internacional por su apoyo decidido y resaltó que esta movilización demostró el profundo compromiso de la ciudadanía con la estabilidad y la democracia del país.
El embajador boliviano también informó que más de una decena de militares involucrados en el intento de golpe han sido detenidos y están a disposición del Ministerio Público para ser procesados conforme a la ley.
El presidente Luis Arce denunció el miércoles públicamente el intento del golpe de Estado tras notar un movimiento inusual de tropas en la plaza Murillo, el corazón político de Bolivia.
La rápida reacción del nuevo comandante del Ejército, José Sánchez, quien ordenó el retorno de las tropas a sus unidades y reafirmó el apoyo al Gobierno, fue crucial para estabilizar la situación.
