Las brasileñas Superintendencia Estatal de Tecnología de la Información y Comunicación (Setic) y el Sistema de Protección de la Amazonía (Censipam) anunciaron que trabajan en el desarrollo de un ChatBot, una herramienta de Inteligencia Artificial para que sea su aliado en la vigilancia y la lucha contra los incendios en la Amazonía.

«Nos entusiasma explorar esta tecnología y colaborar con Setic para desarrollar una herramienta basada en la inteligencia artificial que contribuya a nuestros esfuerzos conjuntos por preservar la Amazonia», afirmó a Xinhua el gerente regional de Cenispam en Rondonia, Caue Moura.

La expectativa es que esta nueva funcionalidad proporcione información en tiempo real sobre las áreas que están siendo quemadas, especialmente durante la estación seca. Con estos datos, las autoridades deberían poder responder con mayor rapidez y eficacia.

También según el Censipam, la integración de los datos del Panel de Incendios permitirá un análisis más preciso y rápido de las zonas quemadas en la Amazonía, posibilitando una respuesta inmediata para mitigar los impactos ambientales y sociales causados por los incendios forestales.

Moura recordó que la creciente incidencia de los incendios en la Amazonia ha despertado la necesidad de estrategias más avanzadas y eficaces para combatirlos.

«Gracias a la monitorización en tiempo real, el nuevo sistema de IA puede procesar grandes volúmenes de datos procedentes de satélites, sensores y otras fuentes. La idea es que los focos de incendio se identifiquen pronto y las autoridades respondan con mayor rapidez», agregó el gerente regional.

La idea es que la IA analice datos complejos, como los patrones meteorológicos. Los algoritmos de IA también pueden utilizarse para prevenir la propagación de incendios en función de diversas variables, como el viento, la humedad del aire y las características geográficas.

Según Moura, «este esfuerzo conjunto demuestra el compromiso del Estado con la protección del medio ambiente. Al explotar la tecnología a través del ‘Panel de Fuego’, ambas instituciones refuerzan su compromiso mutuo con la preservación de la Amazonia», subrayó.

Además, Brasil dispone desde hace tres años de un sistema basado en la IA capaz de predecir la aparición de incendios en la Amazonía. Históricamente, julio es el mes más seco y la incidencia de incendios forestales es mayor. Sin embargo, sólo con esta información no es posible identificar dónde se producirá el próximo incendio.

El fuego se ve favorecido por la combinación de una humedad muy baja y altas temperaturas. Con esta información, el profesor Fábio Teodoro de Souza, de la Pontificia Universidad Católica de Paraná, entrenó un algoritmo con patrones meteorológicos relacionados con las «ocurrencias» o «no ocurrencias de incendios».

«Una vez entrenados con datos del pasado, los modelos pueden generalizar situaciones futuras y predecir el riesgo de incendios forestales», explicó a Xinhua De Sousa. «Con ello, el sistema puede generar alertas que permitan tomar medidas para evitar o reducir los efectos de la catástrofe», agregó.

La tecnología se probó inicialmente en el Parque Nacional de Chapada das Mesas, en Maranhão (noreste), una región dominada por la sabana. Allí, el modelo utilizó tres mediciones diarias para predecir incendios con 6 o 12 horas de antelación. El índice de precisión fue del 85 por ciento.

Además de los incendios forestales, la inteligencia artificial puede adaptarse para prever fenómenos como los corrimientos de tierras provocados por tormentas, e incluso predecir hospitalizaciones por enfermedades respiratorias, a partir de una combinación de datos meteorológicos y concentraciones de contaminantes atmosféricos.