El concierto gratuito del cantante Julión Álvarez, realizado en Puebla como parte de los festejos patrios, dejó un saldo de al menos una docena de personas lesionadas, según reportes de medios locales.

El incidente ocurrió sobre la Avenida Juárez, donde una multitud derribó las vallas metálicas colocadas para mantener el control de los accesos al evento. Testigos relataron que los asistentes comenzaron a empujar las barreras en su intento por acercarse al escenario, provocando caídas y empujones.

Durante el caos, varias personas fueron pisoteadas, generando momentos de tensión. Elementos de seguridad intervinieron para controlar la situación y evitar una tragedia mayor.

Un hecho similar se registró en otro punto del acceso principal poco después de la medianoche, cuando la multitud también derribó los arcos de seguridad al inicio del espectáculo. A pesar de estos incidentes, el concierto continuó con normalidad y Julión Álvarez interpretó sus éxitos ante más de 35 mil personas que abarrotaron el Paseo Bravo.

En entrevista, el gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, y el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Francisco Sánchez González, aseguraron que los festejos del 15 y 16 de septiembre concluyeron con “saldo blanco” en los 217 municipios del estado.

“La arenga desde Palacio Municipal, el concierto de Julión Álvarez y demás actividades se desarrollaron con éxito”, declaró Armenta, respaldado por un reporte de la SSP que afirmó que no hubo riñas graves ni víctimas que comprometieran la seguridad del evento.

Uno de los hechos destacados durante la jornada fue la activación de protocolos de búsqueda por la desaparición de una camioneta oficial de la SSP. Se trataba de una unidad GML Sunray 2025 blanca, que había sido estacionada cerca del templete. Horas más tarde, fue localizada, aunque las autoridades no aclararon si se trató de un robo o de una confusión logística.

Pese a los esfuerzos del gobierno por destacar la organización del evento, en redes sociales se multiplicaron las críticas hacia la administración estatal por el alto costo de los festejos. Usuarios reclamaron que los 15 millones de pesos destinados al evento debieron invertirse en obras prioritarias, como la reparación de calles en mal estado.

“Ese dinero debería invertirse en las calles de Puebla, ¡hay miles de baches y este señor solo pensando en la diversión!”, expresó un usuario en Facebook. Otros internautas también alertaron sobre el aumento en el robo de autopartes durante eventos masivos y cuestionaron si realmente valía la pena el riesgo.

Frente a las críticas, el gobierno estatal defendió la inversión, asegurando que las festividades dejarán una derrama económica significativa y contribuirán a la reactivación turística de la capital poblana.