Las autoridades mexicanas encontraron el cuerpo de un bombero de Los Ángeles que desapareció en agosto y que resultó baleado durante un intento de secuestro, se anunció el miércoles.
Se llevó a cabo una identificación completa de Francisco Aguilar, cuyos restos óseos incinerados fueron localizados el 23 de octubre en una zona despoblada, dijo Hiram Sánchez, Fiscal General del estado de Baja California, durante una conferencia de prensa.
El jefe del Departamento de Bomberos de Los Ángeles, Ralph Terrazas, expresó sus condolencias a la familia de Aguilar, quien tenía 48 años.
“Este es un trágico resultado de un caso que esperábamos que terminara de otra forma”, señaló en un comunicado.
Aguilar, un bombero y paramédico con 20 años de experiencia, desapareció el 20 de agosto luego de viajar a su residencia ubicada cerca de Rosarito, en Baja California.
El mes pasado, dos mexicanos, una mujer de 32 años y un hombre de 27, fueron arrestados en una carretera cercana a Playas de Rosarito, al sur de Tijuana. Las autoridades dijeron que los sospechosos tenían en su poder algunas pertenencias de Aguilar, como tarjetas de crédito que habían utilizado en Rosarito, Ensenada y Tijuana después de su desaparición.
Ambos serán acusados de homicidio, dijo Sánchez.
De acuerdo con la investigación, una conocida de Aguilar, identificada como Fanny “N”, lo llevó a una reunión para secuestrarlo y pedir un rescate, comentó Sánchez.
Cuando llegó al lugar de encuentro, fue interceptado por una camioneta. Aguilar intentó escapar antes de que un hombre, identificado como Santos “N”, le disparara, agregó el Fiscal.
De momento no estaba claro si el disparo provocó la muerte de Aguilar, quien falleció en algún momento del crimen. Posteriormente, la pareja incineró su cuerpo en Playas de Rosarito, dijo Sánchez.
Las autoridades han dicho que la pareja había negado tener información sobre el paradero de Aguilar.
Sánchez agregó que hubo otra persona involucrada en el crimen, aunque no proporcionó detalles de inmediato.
Los detectives también encontraron el Jeep de Aguilar, que había sido robado por la pareja y vendido a una tercera persona que desconocía del origen del vehículo, dijo Sánchez.
Información vía: Sin Embargo