El Gobierno de Ecuador evalúa la posible declaratoria de emergencia nacional por la ola de incendios forestales que azotan al país en medio de una extrema sequía, informó la ministra de Ambiente y presidenta del Comité Nacional de Operaciones de Emergencia (COE), Inés Manzano.
La funcionaria indicó en rueda de prensa, tras una sesión del COE liderada por el presidente Daniel Noboa, que se dispuso a la Secretaría Nacional de Gestión Riesgos elaborar un «informe técnico justificativo para poder evaluar la factibilidad de una declaratoria de emergencia nacional».
Noboa, dijo que «lamentablemente, esta reunión se debe a una desgracia que como país estamos viviendo».
Ecuador tiene actualmente 11 incendios activos en cuatro provincias, entre ellas Pichincha (centro norte), donde se ubica la capital Quito, declarada en emergencia por un fuerte incendio ocurrido el martes en el sector de Guápulo, al oriente de la urbe.
Este incendio, que todavía no ha podido ser controlado, deja hasta el momento al menos cuatro heridos, 107 familias evacuadas, siete viviendas afectadas totalmente y animales calcinados, según informes preliminares de las autoridades locales.
La Policía detuvo a un sospechoso de provocar el incendio en Guápulo, mientras el Gobierno ratificó que los responsables de estos hechos serán procesados por «terrorismo».
En Quito, existen además otros incendios que se mantienen activos y amenazan con reactivarse por efecto del viento y la extrema sequía que afecta al país sudamericano.
La Secretaría Nacional de Riesgos declaró el pasado 21 de septiembre en «alerta roja» a 19 de las 24 provincias del país debido a la sequía, déficit hídrico, incendios forestales y afectaciones a la agricultura y a la producción hidroeléctrica.
El COE resolvió implementar la reforestación de las zonas afectadas por los incendios, que según Manzano, solo en Quito superan las 146 hectáreas.
Asimismo, se ordenó la activación de un fondo de emergencia para brindar apoyo en tareas de limpieza y reconstrucción de la infraestructura pública afectada; y activar mecanismos para la reposición y reparación de viviendas afectadas o destruidas por los incendios previa evaluación.
El COE decidió suspender, por las próximas 48 horas, las clases presenciales en Quito para precautelar la salud de los estudiantes debido a la mala calidad del aire.
A su vez, el Ministerio de Trabajo dispuso la modalidad del teletrabajo en el sector público el jueves y viernes a escala nacional, debido a la crisis energética que afronta el país derivada de la sequía.
