Un incendio registrado el lunes afectó las oficinas de la Sección 147 del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores de AHMSA en Monclova, Coahuila. El siniestro fue provocado por personas en situación de calle que se introdujeron al inmueble y encendieron una fogata, informaron autoridades sindicales.

El edificio, ubicado al norte de la ciudad, ha permanecido abandonado desde la quiebra de Altos Hornos de México (AHMSA), y ha sido constantemente invadido por personas sin hogar. Néstor Alejandro Torres Terrazas, secretario general de la Sección 147, señaló que el fuego comenzó en el interior del inmueble, donde aún hay muebles, madera y papelería que sirven como combustible.

Aunque no se reportaron personas lesionadas, el incendio representa un riesgo para vecinos y extrabajadores, y evidencia el estado de abandono de las instalaciones sindicales e industriales desde el colapso de la siderúrgica.

Torres Terrazas denunció que han solicitado vigilancia en múltiples ocasiones, pero los accesos traseros sin resguardo permiten la entrada de personas, algunas con adicciones o problemas mentales. “Se meten y prenden fuego con ramas, basura o lo que encuentran. Ya no hay luz ni mantenimiento, es tierra de nadie”, expresó.

El dirigente recordó que algo similar ocurrió en la Sección 288, donde gracias a rondines más frecuentes se logró detener a un responsable. Por ello, pidió a las autoridades reforzar la seguridad para prevenir más incendios o actos vandálicos.

La quiebra de AHMSA, declarada en noviembre de 2024 por el Juzgado Segundo de Distrito en Concursos Mercantiles, dejó una deuda superior a 3,900 millones de dólares y provocó el despido de más de 7,500 trabajadores directos. Desde entonces, varias propiedades sindicales e industriales permanecen abandonadas, sin resguardo ni proyectos de reactivación.

La crisis económica y laboral que atraviesa Monclova y la región centro de Coahuila ha sido calificada por CANACINTRA como una de las peores en décadas, con una caída del 60% en circulación de efectivo. Mientras tanto, dirigentes sindicales insisten en que al menos se garantice la seguridad de los predios, para evitar más daños y proteger a la población.