La mala calidad del aire continúa este jueves en la mayoría de las principales ciudades bolivianas, e incluso en una de ellas es «extremadamente mala», de acuerdo con el Gobierno nacional y municipios.

Este jueves, un informe oficial reveló que la calidad del aire continúa en niveles críticos, poniendo en riesgo la salud pública, especialmente en Cobija, capital del departamento de Pando (norte), donde el Índice de Calidad del Aire (ICA) alcanzó un alarmante nivel de 435 microgramos por metro cúbico.

Esta cifra posiciona a la ciudad en una categoría de «aire extremadamente malo», siendo la más afectada por la crisis ambiental.

La alcaldesa de Cobija, Ana Lucía Reis, alertó este jueves que los índices de la mala calidad de aire en esa ciudad son extremos y que a causa de ellos se incrementaron en un 90 por ciento los problemas respiratorios, a raíz del humo de los chaqueos descontrolados, incendios forestales en Bolivia y principalmente en Brasil.

El Índice de Calidad del Aire clasifica la calidad del aire de la siguiente manera: entre 0 y 50 microgramos por metro cúbico se considera ‘buena’; entre 51 y 100, ‘regular’; entre 101 y 150, ‘mala’; entre 151 y 300, ‘muy mala’; y más de 300 se considera ‘extremadamente mala’.

El responsable del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), organismo técnico descentralizado del Estado, bajo tuición del Ministerio de Medio Ambiente y Agua, Hugo Mamani, manifestó que más del 70 por ciento del humo que está concentrado en el territorio nacional proviene de Brasil, afectando principalmente a Pando (norte), La Paz (oeste), Cochabamba (centro), Potosí (sudoeste) y Chuquisaca (sur).

El funcionario recordó que los incendios forestales en junio pasado se iniciaron en el vecino país de donde transitaron al territorio boliviano por las zonas fronterizas que fueron las más afectadas por las llamas y ahora por el humo concentrado.

Al mediodía de este jueves, la capital boliviana registró un ICA de 202, consolidando su calidad de aire como «muy mala». Ante este panorama, la Sociedad Boliviana de Neumología ha emitido una alerta sanitaria, solicitando al Gobierno que declare emergencia para proteger a la población vulnerable.

Los expertos recomiendan evitar actividades al aire libre y reducir la exposición a los contaminantes, que representan un peligro grave para la salud respiratoria.

Con miles de hectáreas arrasadas por el fuego, fauna devastada y comunidades desesperadas, la situación en Bolivia es crítica. De acuerdo a las previsiones de expertos, la humareda que cubre los cielos del país podría empeorar en los próximos días si no se adoptan medidas contundentes.