La semana pasada se dio a conocer una fotografía donde el gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo aparece con tres personas vinculadas al crimen organizado, sumado a la foto también aparecieron una serie de narcomantas en Oaxtepec y Cuautla, donde señalan al mandatario estatal de recibir dinero, hacer negocios ilegales con el agua, y estar involucrado en el asesinato del activista Samir Flores.
En entrevista con El Universal, Blanco Bravo insiste que no sabe cuándo ni en dónde le tomaron la foto, soy una persona pública y como lo he dicho me tomo fotos con quien sea.
De apariencia tranquila y relajada, el gobernador asegura que las narcomantas le dan risa y dice no estar preocupado, aunque sí por su familia, «el que nada debe nada teme», dice el ídolo del futbol.
El mandatario estatal comenta que tanto la foto como las narcomantas provienen de los narcopolíticos que quieren desestabilizar al estado y a su gobierno, sobre quienes estarían detrás de estos, el exfutbolista dice que no puede dar nombres debido que hay una investigación ya en curso.
«A mí me dan risa las narcomantas, porque imagínate, dicen que me daban dinero hasta para comprar ropa. Ni que no tuviera dinero para comprarla. Son cosas que van a seguir pasando. Me van a seguir colocando mantas y no me preocupa. Es una guerra sucia, porque así se maneja la política aquí, pero no me voy a quedar callado. Siempre he sido una persona que va de frente con quien sea; no voy a tapar lo que hicieron gobiernos anteriores. Pactaron con el narcotráfico y yo no voy a pactar con ellos», dice Blanco.
El también exseleccionado mexicano asegura que no tenía conocimiento de quienes eran esos tres hombres, si los hubiera conocido aviso a la autoridad.
Blanco Bravo cometan que de los 15 grupos delincuenciales que pelean por la entidad en su administración esta cifra se redujo a nueve y de los 10 objetivos prioritarios de sus administración dos fueron detenidos, uno fue abatido y otros está en proceso de sentencia.
Entre estos objetivos se encuentra Homero Figueroa Meza, «La Tripa», uno de los personajes que aparece en la foto con Cuauhtémoc Blanco, a quién el mandatario señaló como un personaje peligroso y andamos tras de él.
Otros de los objetivos de su gobierno son Abel Maya y «El XL» o «El Señorón».
Sobre si pedirá licencia o renunciara al cargo en lo que se realiza la investigación, «Cuau» como también es conocido asegura que no lo hará. «Eso querrán muchos, pero en ningún momento lo he pensado».
LOS PERSONAJES DE LA FOTO
En la polémica foto donde aparece el gobernador de Morelos se encuentran Irving Eduardo Solano Vera «El Profe» o «El Gato» un líder del cártel Guerreros Unidos y luego jefe de plaza en Morelos del cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), detenido por elementos del Ejército el 17 de febrero de 2021 en Cuautla.
Junto a Solano Vera aparece Homero Figueroa Meza, «La Tripa», líder del grupo criminal conocido como »comando Tlahuica» o »Los Tlahuicas».
La organizado liderada por »La Tripa» es señalada del asesinato de Samir Flores, uno de los opositores a la construcción de la termoeléctrica de La Huexca.
El tercer acompañante en la fotografía con el gobernador de Morelos es Raymundo Isidro Castro Santiago, »El Ray», líder regional del CJNG.
CONFIRMAN ENCUENTRO BLANCO-NARCOS
El párroco Juan Alvarado, señalado como uno de los principales y posibles enlaces entre cabezas de grupos criminales y el gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, confirmó el encuentro entre estos personajes en una iglesia de Yautepec.
El encuentro se habría dado en una misa del 12 de diciembre en 2018, donde va la gente, va la multitud, y por supuesto él vio al gobernador, sí, estuvo ahí.
Un video difundido por el periodista Omar Ocampo, Alvarado asegura que él cree «en todo momento en toda persona y deben hacerse las investigaciones correspondientes, más allá de empezar a hacer especulaciones en redes sociales».
Al ser cuestionado si tiene algún vínculo con las personas que aparecen en la fotografía con el gobernador, el religioso aseguró que no tiene «la obligación de conocer de fondo a cada persona que viene y te pide un servicio, llámelo sacramento, llámelo bendición».
