Autoridades culturales de México condenaron este martes la subasta de bienes arqueológicos de la nación latinoamericana, que se realizará estos próximos días en Colorado, Estados Unidos.
La Secretaría de Cultura (Ministerio) y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México anunciaron el envío de una carta a la galería donde se subastarán las piezas debido a que constituyen «un legado invaluable» para las culturas ancestrales de esa nación.
«Especialistas del INAH elaboraron el dictamen arqueológico correspondiente, examinando las características de forma, estilo, materia prima, proporciones, acabados de superficie y estado de conservación de cada pieza», detalló la fuente.
Este estudio determinó que veinte objetos sacados a subasta son monumentos arqueológicos mexicanos, definidos y protegidos por la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos.
Entre las piezas se encuentran figurillas zoomorfas, vasijas, espejos con incrustaciones de piedra verde, fragmentos de esculturas y tapas de braseros tipo teatro, que se ligan a culturas como la maya y teotihuacana, así como estilos escultóricos de México.
Además, las autoridades han iniciado los procesos judiciales y diplomáticos correspondientes ante autoridades nacionales e internacionales, para que las piezas en cuestión sean repatriadas a territorio mexicano mediante los canales oficiales.
Pidieron asimismo a las casas subastadoras reflexionar profundamente sobre los códigos éticos relacionados con la comercialización de bienes culturales expoliados de forma ilegal, para no contribuir «al despojo cultural» ni atentar «contra la memoria de los pueblos».
En México, la ley establece que todos los monumentos arqueológicos, muebles o inmuebles son propiedad de la nación, entendiendo por monumentos arqueológicos todos los bienes producto de las culturas anteriores a la llegada de los españoles.