El Gobierno de México dará prioridad a la protección de los mexicanos en el estado de Texas, Estados Unidos, en caso de que finalmente entre en vigor la Ley SB4, la cual pretende detener el flujo de migrantes mediante su criminalización, informó el jueves la canciller mexicana, Alicia Bárcena.

«Nosotros vamos a proteger, en primer lugar, a nuestros connacionales y tenemos 11 consulados en Texas que tienen instrucciones precisas para brindar protección, apoyo, orientación en caso de que se enfrenten a algún problema», dijo Bárcena en la habitual rueda de prensa diaria del presidente Andrés Manuel López Obrador, esta vez desde el estado de Oaxaca (sureste).

La secretaria (ministra) de Relaciones Exteriores precisó que la administración federal puso en marcha un sistema de apoyo legal, aun cuando la decisión final sobre la propuesta texana se definirá el próximo 3 de abril.

La canciller recordó que el 26 por ciento de la población en Texas es de origen mexicano, por lo que resaltó la contribución que realizan a la economía estatal.

«Algo que es inédito para nuestro país es que se ha logrado un consenso político. Todas las fuerzas políticas, los legisladores, los partidos políticos, los candidatos, el gabinete, estamos actuando todos en conjunto contra esta ley injusta y discriminatoria», precisó Bárcena.

La canciller dijo que la iniciativa en Texas es «profundamente inconstitucional» porque el tema migratorio en Estados Unidos es federal, al igual que en México.

Un tribunal de apelaciones en Estados Unidos bloqueó el miércoles la vigencia de la Ley SB4, luego de que la Corte Suprema autorizara su entrada en vigor.

La ley otorga a las fuerzas del orden la facultad de detener a migrantes irregulares y a los jueces la de ordenar su expulsión a México.