La economía de México podría registrar tasas de crecimiento de hasta el 4,0 por ciento hacia el final de la presente década, apoyada en la consumación del proceso de relocalización que llevan a cabo las empresas, consideró el lunes el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes.
Con ello, México superaría el crecimiento económico promedio del 2,5 por ciento que ha observado por décadas y tendría el potencial de duplicar sus niveles de exportación y de inversión extranjera, consideró Cervantes en la «Cumbre ‘Nearshoring’ México».
«El fenómeno del ‘nearshoring’ (relocalización) representa en definitiva una nueva era económica del mundo», explicó el líder empresarial en un discurso.
«Después de las crisis financieras de las décadas pasadas, así como del dramático episodio de la pandemia, el mundo ha dado paso de la era de la globalización hacia la nueva época de la relocalización o ‘nearshoring'», añadió.
México tiene altas expectativas en este rubro pues cuenta con 363 anuncios adicionales de inversión y 50 proyectos de parques industriales en marcha, indicó Cervantes.
Para consolidar el proceso de relocalización en el país, hace falta mejorar la seguridad en cuanto al combate del crimen organizado, desarrollar más infraestructura con sentido de conectividad, así como contar con agua sustentable y energía limpia, explicó el líder del CCE.
También se requiere trabajar en la simplificación regulatoria para facilitar la inversión y el comercio en condiciones de competencia justa, reforzar la capacitación y tecnología, sobre todo de las Pymes, y promover la inversión en todas las regiones del país, agregó.
La economía mexicana, la segunda mayor de América Latina después de Brasil, creció un 3,1 por ciento en el 2023, según las cifras oficiales más recientes.
El Gobierno de México estima un crecimiento económico para el país de entre 2,5 por ciento y 3,5 por ciento en 2024.