Alive Productions, la empresa colombiana que había negociado una presentación de Christian Nodal en Medellín para 2022, anunció que inició un proceso legal tras la cancelación del evento. El caso ha llegado a una resolución: el intérprete de “Adiós, amor” deberá pagar 2.5 millones de dólares por las pérdidas que generó a la compañía al no devolver el dinero completo del espectáculo.

En un comunicado, la empresa informó que el pasado 15 de octubre las autoridades fallaron a su favor, indicando que Nodal debe indemnizarlos debido a las pérdidas económicas y daños reputacionales que sufrió la compañía. La cancelación ocurrió menos de 24 horas antes del evento en el Estadio Atanasio Girardot, programado para el 26 de marzo de 2022. El equipo de Nodal argumentó problemas mecánicos en el avión, aunque investigaciones de Alive Productions posteriormente demostraron que no había plan de vuelo previsto.

La cancelación de último momento dejó a la empresa con altos costos, incluyendo el reembolso de boletos para unos 32,000 asistentes y la reparación de daños en el estadio, como pantallas, puertas y sanitarios.

«Estos incidentes resultaron en pérdidas económicas significativas y un daño considerable a la reputación de Alive en la industria del entretenimiento», señala el documento.

Alive Productions señaló que tras la cancelación, Nodal y su padre, Jaime González, acordaron un reembolso total y asumir los costos adicionales por daños y boletos, algo que no sucedió. La empresa afirma que sólo recibieron una parte del dinero, lo cual llevó a esta acción legal.

Alive Productions informó que Nodal y su equipo se comprometieron a asumir las consecuencias, aunque advirtió que esta demanda es apenas la primera de varias, ya que el cantante habría incumplido otras 26 fechas adicionales.

«Este es el primero de una serie de de incumplimientos presentados en las 27 fechas que Nodal fijó desarrollar con la empresa colombiana, Ahora, Alive continua con acciones legales que buscan cobrar la cifra adecuada y resarcir los daños causados a su imagen y reputación en el desarrollo de la relación contractual».