A 300 metros caminando de la zona de derrumbe en el Cerro de Chiquihuite, hay otras familias que temen por un nuevo desastre.
Antes del viernes, cuando ocurrió el desastre que mantiene sepultadas a tres personas, ya le habían llamado a Protección Civil del Estado de México porque hubo desprendimiento de piedras y tierra detrás de las casas.
Autoridades del gobierno del Estado de México y del municipio de Tlalnepantla informaron que se incrementó el número de viviendas notificadas de 80 a 126 que deben desalojar la zona donde se desgajó el Cerro del Chiquihuite.
Hasta el momento sólo 76 personas se han trasladado a los cuatro albergues temporales instalados por las autoridades municipales.
Asimismo, células de los tres niveles de gobierno visitan las casas para verificar cuántas personas aún permanecen en sus domicilios y exhortarlos a que atiendan la notificación del riesgo.