Las excavaciones en busca de detenidos desaparecidos durante la dictadura (1973-1985) en Uruguay se reanudaron el lunes en el predio militar del Batallón 13, en la periferia de Montevideo, después de dos años, confirmó el Grupo de Investigación en Antropología Forense (GIAF).
«Esta mañana vinimos a continuar las tareas que habíamos dejado en la trinchera número nueve de esta zona cautelada que estuvo por dos años detenida», dijo a la prensa la responsable del GIAF, Alicia Lusiardo.
En junio de 2022 se suspendieron las excavaciones en el Batallón 13 por la rotura de un cable de alta tensión como consecuencia de una maniobra de una máquina retroexcavadora.
Lusiardo informó que en esta jornada se cavaron 50 trincheras en ese predio y «pudimos comprobar que el lugar no tiene mucha potencia» porque «excavamos hasta un metro y ya encontramos el sedimento estéril».
«Entonces, esto va a ir más rápido quizás de lo proyectado porque no hay mucha potencia», indicó.
Los trabajos de excavación se realizan cerca del galpón conocido como «300 Carlos», que ofició como lugar de detención y tortura de unos 500 opositores de la dictadura entre 1975 y 1977.
En el Batallón 13 se hallaron los restos de dos detenidos desaparecidos. A fines de julio pasado se encontraron los restos de un detenido desaparecido en el Batallón 14, departamento de Canelones (sur), que aún no ha sido identificado.
Según la Secretaría de Derechos Humanos para el Pasado Reciente, durante la dictadura hubo 197 desaparecidos a manos de la represión y hasta el momento solo se han identificado en el país siete cuerpos.
La justicia uruguaya ha procesado -gracias a excepciones a la ley de impunidad ratificada en dos referéndums- a una veintena de militares y policías por la represión ilegal, entre ellos dos exdictadores, por delitos de «desaparición forzada».