Cinco drones ucranianos fueron derribados el martes por la mañana sobre Nueva Moscú, Rusia, lo que provocó un retraso de tres horas en el aeropuerto de Vnukovo, pero no se reportaron heridos.
Los drones tenían objetivos en las regiones de Moscú y Nueva Moscú, dijo el Ministerio de Defensa ruso, y cuatro de ellos fueron derribados por la defensa antiaérea y uno por la guerra electrónica.
Sergei Sobyanin, alcalde de Moscú, describió el ataque como otro intento de Kiev de desestabilizar Rusia y poner en peligro su seguridad y soberanía.
El ataque fue condenado como acto terrorista por Maria Zakharova, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia.









