El Papa León XIV presentó al Vaticano como sede de una posible negociación entre Rusia y Ucrania, en un nuevo intento diplomático por poner fin al conflicto bélico. La propuesta fue avalada por el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, y por el mandatario estadounidense Donald Trump, quienes buscan una salida política al estancamiento de la guerra.
En los últimos tres días, el Papa se reunió en Roma con Zelensky y con el vicepresidente estadounidense J.D. Vance, a quienes compartió su intención de que el Vaticano funcione como un espacio neutral de diálogo. Esta iniciativa recuerda los éxitos anteriores de la diplomacia vaticana, como evitar una guerra entre Argentina y Chile durante el papado de Juan Pablo II, o el deshielo entre EE.UU. y Cuba con Francisco.
El respaldo de Trump a la mediación papal llegó después de que fracasaran sus recientes esfuerzos directos por interceder. El presidente estadounidense conversó durante dos horas con Vladimir Putin y mantuvo dos contactos con Zelensky, sin lograr un acuerdo de cese al fuego.
Putin, por su parte, agradeció el gesto pero condicionó cualquier negociación a cinco exigencias: el reconocimiento de la soberanía rusa sobre Crimea; la anexión de Donetsk, Kherson, Luhansk y Zaporiyia; la prohibición de ingreso de Ucrania a la OTAN; la negativa al envío de tropas de Francia y Reino Unido a Ucrania; y el levantamiento de todas las sanciones impuestas a Rusia desde 2022.
Zelensky rechazó de plano esos reclamos y, lejos de moderar su posición, solicitó a Estados Unidos intensificar las sanciones contra Moscú. “Si los rusos no están dispuestos a detener los asesinatos, debe haber sanciones más duras”, publicó en su cuenta oficial de X (antes Twitter).
Trump respondió con cautela, afirmando que “cree que algo podría suceder”, pero si no logra avances se apartará del proceso. “Si no, simplemente me aparto y tendrán que seguir adelante”, declaró desde la Casa Blanca.
En este contexto, la propuesta del Papa podría ofrecer una vía diplomática alternativa. Tanto Trump como Zelensky dieron su aprobación, y ahora se espera la respuesta oficial de Moscú, aunque desde el Kremlin insisten en que sus condiciones deben cumplirse antes de sentarse a negociar.
Desde el Vaticano, fuentes señalaron que León XIV está dispuesto a encabezar la mediación, pero solo si cuenta con el respaldo explícito de Estados Unidos, la Unión Europea y el Reino Unido. El Papa aguardará esa señal pública antes de avanzar con una negociación que, advierten, será compleja y exigente.
Zelensky, aunque apoya el rol del Vaticano, advirtió que esta mediación no debe implicar un repliegue de Estados Unidos del proceso. “Es crucial que EE.UU. no se distancie, porque el único que se beneficia es Putin”, advirtió.