La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó este jueves 19 de junio que su gobierno ya investiga el hallazgo de un tanque metálico con advertencias de material peligroso, presuntamente proveniente de un cohete de SpaceX. El objeto habría caído en territorio mexicano, específicamente en el estado de Tamaulipas, lo que ha generado preocupación por los posibles efectos ambientales y legales de esta “basura espacial”.
Sheinbaum informó durante su conferencia matutina que dio instrucciones a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y a la Agencia Digital, que cuenta con expertos en comunicaciones aeroespaciales, para analizar el caso a fondo. El objetivo, dijo, es entender el incidente tanto desde el punto de vista técnico como legal antes de emitir una postura oficial.
“Pedí a la Agencia Digital que revisara bien la nota porque tienen la parte de comunicaciones aeroespaciales, para saber realmente a qué se refiere el asunto y tener apoyo técnico. Luego, Medio Ambiente y otras secretarías nos darán información sobre esta publicación y con eso podremos informar y tomar una posición al respecto”, declaró la presidenta.
El hallazgo se dio tras la fallida prueba de lanzamiento de la nave Starship el pasado 27 de mayo, realizada por SpaceX, la compañía de Elon Musk. Durante el ensayo en la planta de Boca Chica, Texas, la nave de 123 metros se desintegró en pleno vuelo y el propulsor Super Heavy cayó en el Golfo de México. Al parecer, restos del cohete llegaron hasta México.
El objeto metálico encontrado en Tamaulipas contiene etiquetas que advierten sobre la presencia de fósforo blanco, un químico altamente tóxico y peligroso. Su exposición al oxígeno puede provocar reacciones violentas, causar quemaduras graves, e incluso afectar órganos vitales como el hígado, los riñones y el sistema nervioso.
El descubrimiento fue reportado por autoridades locales, activistas ambientales y voluntarios del campamento tortuguero en Matamoros. Estas organizaciones alertaron de inmediato sobre el potencial riesgo ecológico y pidieron atención urgente ante un posible incidente internacional.
Sheinbaum aseguró que cualquier decisión se tomará con base en evidencia científica, y reiteró el compromiso de su administración con la protección ambiental, especialmente frente a residuos que traspasan fronteras sin control.